23.3.09

sólido líquido gas


Ya hay tantas lágrimas en el mundo,
en el lago común,
que no quiero más.
No son más que agua sobre nube de lluvia,
irrefrenables ríos como un torrente en un pozo,
vacío.
Quiero llevar el camino del ruiseñor,
del señor de los bosques,
la sencilla alegría de estar viva,
cantando, andando,
naciendo a cada paso
y ser.

la belleza que me mató


Ella vino a buscarme de noche.
Su manto estaba bordado todo él con flores caducas que renacían cada vez que me acercaba a olerlas. Me dijo: "Ven conmigo, este mundo de aquí ya no es el tuyo. Puedes morir en la imperfección o puedes vivir en la belleza."
Yo quería vivir, por supuesto pero...
Tuve que mirarme a los ojos, a la espalda, al cuello. Y elegí, vivir en la imperfección y morir en la belleza el día en que ella viniera a buscarme.

Y entonces, ella vino a buscarme una noche. Su manto estaba bordado todo él...